4 sept 2020

Tenet


TENET (Tenet, USA 2020)
Director: Christopher Nolan
Reparto: John David Washington, Robert Pattinson, Elizabeth Debicki, Kenneth Branagh, Aaron Taylor-Johnson, Clémence Poésy, Michael Caine, Himesh Patel
Guión: Christopher Nolan
Duración: 150'

¡Cuidado! Warning! Achtung! Posibles spoilers del futuro podrían estropear tu experiencia presente

"Lo nunca visto". Expresión de la que se ha abusado tanto que ha terminado perdiendo hasta su sentido original pero a la que 'Tenet', la undécima película de Christopher Nolan, se ajusta como un guante... quizás la primera cinta en hacerlo en mucho tiempo. 'Tenet' es una bacanal sensorial, 150 minutos exactos de estímulos sin freno que te dejan tan exhausto como a un niño el primer día de cole. Y también es una de las películas más auténticamente frikis de la historia, una auténtica ida de olla que se puede hacer muy cuesta arriba si no entras en su juego extremo. Tan friki que está inspirado por un misterioso palíndromo dentro de otro palíndromo.   

Normalmente las pelis en la liga de frikismo de 'Tenet' ('Primer', 'Triangle', 'Predestination', 'The Man of Earth'...), muy alejadas del frikismo "mainstream" que domina la taquilla en el último par de décadas, suelen contar con presupuestos escuetos, repercusión limitada y, quizás, culto posterior. En cambio 'Tenet' es la película más cara de la historia no perteneciente a una franquicia: 200M USD más lo gastado en publicidad y marketing [1]. Y no sólo es que haya habido un gran estudio dispuesto a invertir tal cantidad de dinero en una locura semejante sino que incluso se ha atrevido a estrenarla en medio de una pandemia global como la que estamos viviendo en este 2020 incluso a sabiendas de que le va a perder dinero en vez de guardársela en un cajón hasta que lleguen tiempos mejores. Sombrerazo a los señores de Warner, los huevos como el caballo de Espartero, eso es así.

Pero hablemos de la película. 'Tenet' es una peli de espías muy clásica y como toda buena peli de espías que se precie hay dos bandos enfrentados en una Guerra Fría. Es aquí donde la ciencia-ficción más "hard-boiled" hace acto de presencia: si, por ejemplo, en la serie 'Counterpart' (muy recomendable) los dos bandos eran nuestro mundo y un mundo paralelo que agonizaba y buscaba venganza, aquí dichos bandos son nuestro presente y un futuro donde el mundo y la raza humana agonizan también pero donde también se ha conseguido invertir la entropía de los objetos y las personas. De hecho una científica ha llegado a desarrollar un algoritmo que podría invertir la entropía de TODO, lo que podría suponer no sólo el fin del universo sino, con efecto retroactivo, llevar incluso a que el propio universo nunca hubiera existido. Movidote.

Obviamente esta científica, temiendo este efecto tan extremo, decide deshacerse del algoritmo. Para ello divide la formula en nueve partes, las mete en artilugios físicos y los manda a distintos momentos del pasado. El escondite perfecto. Pero también desde el futuro alguien está mandando información de como encontrar estos objetos y un magnate ruso (Kenneth Branagh) está haciéndose con todos, como si fueran Pokemons. El último que le falta se encuentra en la Ópera de Kiev y piensa recuperarlo simulando un ataque terrorista. Y es aquí donde y cuando empieza 'Tenet', con una escena de las que quitan el aliento pero, claro, nosotros todavía no tenemos ni puñetera idea de todo este tinglado. Y El Protagonista de la película (del cual nunca llegamos a saber su nombre aunque si se nos informa adecuadamente de que es El Protagonista), tampoco.

El atentado "fake" sale mal y desde ese momento somos testigos del intento del Protagonista (John David Washington), junto con un particular compañero de nombre Neill (Robert Pattinson) [2], por encontrar a través de medio mundo (poco que envidiarle a las "tournés" de James Bond o Ethan Hunt en sus sagas) a quien está "fabricando" esos objetos con la entropía invertida y cual es su objetivo último. Un frenético ir y venir coronado con cuatro grandes set pieces de acción (además del opening en la Ópera): el "bungee jumping" invertido en la India, el robo en el puerto franco del aeropuerto de Oslo (con avión real estrellado incluido), la persecución en la autopista de Tallin y el apoteósico final con la pinza temporal en la ciudad secreta soviética de Stalk-12 [3]. Cada uno más grande, largo e impresionante que el anterior.   

En 'Tenet' Nolan se ha dejado de sentimentalismos. Aquí no hay esposa muerta como la que atormenta a Cobb en 'Origen' ni hijos abandonados en pos de salvar a la humanidad como los que atribulan a Cooper en 'Interstellar'. Todo está supeditado a la trama y a su avance (hacia delante o hacia atrás, eso sí) imparable. El único alivio es un humor socarrón que te hace soltar unas cuantas carcajadas inesperadas (las imaginativas maneras del Protagonista para evitar dar su nombre, la pachorra de Neill, el primer encuentro entre El Protagonista y Sartor, el momento briefing...).

Tan a saco va la historia que la motivación del Protagonista se antoja algo difusa e incomprensible hasta que sobre el pitido final y de forma algo ambigua conocemos que no se trata de una mera herramienta de Tenet sino que el mismo es el creador de Tenet y el salvador del mundo y la historia verbigracia de un bucle finamente dibujado a lo largo de todo el metraje.

John David Washington es una bestia física (como había demostrado en la serie 'Ballers') y cumple sobradamente como El Protagonista en las numerosas escenas de acción aunque le falta algo de carisma para llevar la historia sobre sus hombros. Por su parte Kenneth Branagh, aunque no tan histriónico como otras veces, no convence demasiado como el villano. Los dos quedan eclipsados por unos muy cómodos Robert Pattinson y Elizabeth Debicki en unos papeles que dominan a la perfección [4]. Caine, Poésy y Taylor-Johnson tienen papeles bastante menores.

En cuanto a la música no se echa demasiado de menos al habitual Hans Zimmer. El sueco y ganador del Oscar Ludwig Goransson (también autor de la genial música de 'The Mandalorian' donde recoge el testigo de otro mítico como John Williams) cumple con creces con una omnipresente composición muy electrónica y atronadora que se funde a la perfección con las imágenes haciéndolas todavía más potentes. Una pena que no esté el disco todavía en Spotify y demás plataformas de streaming para fundirlo a escuchas.

En definitiva 'Tenet' es la evolución lógica del cine de Christopher Nolan: un artefacto artesanal (mitad de planos con CGI que 'Origen', cero presencia del croma, grabada en celuloide...), complejo y sin concesiones. El personaje de Clémence Poésy dice en un momento dado de la película "No trates de entenderlo, siéntelo". Si le haces caso y entras en el juego y lo sientes, te volará la cabeza. Si no, seguramente la odiarás... y con razón. Sin término medio. Seguramente no sea la mejor película de Nolan, pero sí la más "suya" desde 'Memento'. Para bien o para mal.  

Puntuación: 9 / 10.

Pd: primer acercamiento a una sala de cine de este humilde pollo desde aquellos felices últimos días de febrero cuando eso del Coronavirus sonaba a chiste. Experiencia extraña pero satisfactoria. Hay actividades mucho más arriesgadas que acercarse al cine, la verdad sea dicha.

Un saludete guap@s.

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[1] También es la película más cara protagonizada por un actor no blanco. Ni Will Smith ni el señor padre de John David Washington, el gran Denzel, han comandado nunca una producción tan grande y cara como esta.

[2] No creo que el peinado, vestuario y maneras del personaje de Pattinson sean casuales: se trata de un poco disimulado sosias del propio Nolan guiando al Protagonista como él nos guía a nosotros por los vericuetos de sus particulares historias.

[3] Aquí la fascinante historia de estas ciudades secretas, que no aparecían en los mapas y la cartografía, de la Unión Soviética.

[4] Los papeles de Pattinson en 'Z, la ciudad perdida' y de Debicki en la serie 'El infiltrado' son muy similares a los que tienen en 'Tenet' y no sería de extrañar que Nolan los hubiera tomado en consideración a la hora de elegirlos.